El gas licuado de petróleo (GLP) y el gas natural son dos fuentes de energía ampliamente utilizadas en la actualidad, cada una con características únicas y aplicaciones específicas según el rubro o las necesidades que tengan las personas. Aunque ambos son combustibles gaseosos, existen diferencias significativas en su origen, composición y relación con el medio ambiente. ¿De cuáles estamos hablando? Sigue leyendo este artículo que, a continuación, te tenemos la respuesta.
Orígenes del gas licuado de petróleo
Si hablamos de sus orígenes, el GLP se obtiene como subproducto del procesamiento del petróleo crudo y la producción de gas natural. Se compone principalmente de propano y butano, dos hidrocarburos que se encuentran en estado gaseoso a temperatura ambiente. Para facilitar su almacenamiento y transporte, se somete a un proceso de licuefacción, convirtiéndolo en un líquido altamente compacto que puede ser almacenado luego dentro de tanques para ser transportados hacia su destino final.
Resulta ser mucho más versátil que el gas tradicional y se utiliza en una variedad de aplicaciones, como calefacción doméstica, cocción, generación de energía y como combustible para vehículos. La facilidad de almacenamiento y transporte del gas licuado de petróleo lo hace especialmente útil en áreas donde el acceso al gas natural es limitado. De igual modo, es considerado una fuente de energía limpia en comparación con los combustibles fósiles tradicionales como el carbón y el petróleo.
Diferencias con el gas natural
Eficiencia energética
El GLP tiende a tener un contenido energético ligeramente mayor por unidad de volumen en comparación con el gas natural. Aunque tiene un contenido energético ligeramente menor, a menudo es más eficiente y económico para aplicaciones a gran escala debido a su disponibilidad y transporte a través de gasoductos.
Composición química
La composición también es diferente, ya que el gas natural es principalmente metano, mismo que se produce por la descomposición de plantas. El gas licuado de petróleo, en cambio, se forma gracias al propano, butano y propileno. El gas natural es más ligero y se dispersa más rápidamente, mientras que el GLP, al ser más pesado, se puede concentrar rápidamente durante una fuga.
Impacto ambiental
Ambas son consideradas más limpias en comparación con combustibles fósiles. Sin embargo, la comparación ecológica resulta ser un tema complejo y depende de varios factores. Incluida la composición específica de cada uno y su ciclo de vida completo, desde la extracción hasta el consumo.
Información de contacto
En resumen, aunque tanto el gas licuado de petróleo como el gas natural son opciones valiosas en la matriz energética actual, sus diferencias hacen que cada uno sea más adecuado en ciertos contextos. Aprende más del tema dando Clic aquí. Contáctanos a los números (+51) 744 0553 / (+51) 947 249 122 o (+51) 987 645 769 o también al correo electrónico [email protected] para asesoría personalizada en servicios de estaciones de servicio GLP, plantas de envasado y consumo directo. Encuéntranos en Calle El Rubí Nro. 1227 Urb. Los Pinares, Los Olivos, Lima – Perú.